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Un visitante en el Centre Pompidou-Metz en Francia consumió la infame obra «Comedian» de Maurizio Cattelan—un plátano pegado a la pared con cinta adhesiva valorado en 6,2 millones de dólares—el 13 de julio de 2025, provocando una respuesta irónicamente ingeniosa del artista italiano, quien expresó su decepción porque el hambriento visitante del museo había «confundido la fruta con la obra de arte» y no se había comido también la cáscara y la cinta adhesiva.

Incidente de Consumo de Plátano en el Pompidou-Metz

El sábado 13 de julio de 2025, alrededor del mediodía, un visitante que se identificó únicamente como «Peter» retiró el plátano de «Comedian» de Maurizio Cattelan en el Centre Pompidou-Metz, lo peló y se lo comió. Según se informa, el hombre declaró estar «conmocionado» por la tasación de la obra de arte en 6,2 millones de dólares, lo que aparentemente motivó su improvisado bocadillo. El personal de seguridad del museo «intervino rápida y calmadamente» tras el incidente, y la obra fue «reinstalada en cuestión de minutos», según funcionarios del museo.

El plátano estaba en exhibición como parte de la exposición «Dimanche Sans Fin» (Domingo sin fin), organizada para celebrar el 15º aniversario del Pompidou-Metz. A pesar del consumo de la fruta valuada en millones de dólares, el museo no se inmutó, señalando que «como la fruta es perecedera, se reemplaza regularmente según las instrucciones del artista.» Según informes locales, no se presentó ninguna denuncia contra la persona que comió el plátano.

El plátano de 6,2 millones de dólares

En noviembre de 2024, «Comedian» volvió a ser noticia cuando la segunda edición de la serie limitada de tres de Cattelan se vendió por la asombrosa cifra de 6,2 millones de dólares en Sotheby’s en Nueva York, un aumento dramático respecto al rango de precios de 120.000 a 150.000 dólares cuando debutó por primera vez en Art Basel Miami en 2019. El comprador, el empresario de criptomonedas Justin Sun, llamó la atención al comerse la banana en el escenario inmediatamente después de su compra, comparándola con un activo cripto y declarando que «el verdadero valor es el concepto en sí». Sun también anunció que compraría 100.000 bananas a un vendedor ambulante fuera de Sotheby’s que había suministrado la fruta para la exhibición.

El precio astronómico reavivó el debate sobre el valor en el arte contemporáneo. A diferencia de las obras de arte tradicionales, los compradores de «Comedian» no adquieren la banana física ni siquiera la cinta adhesiva, sino el certificado de autenticidad con instrucciones detalladas para exhibir la pieza. El valor de la obra radica en su naturaleza conceptual: un comentario sobre los mercados de arte que se vuelve aún más preciso a medida que su precio alcanza los millones. Como Cattelan pretendía, la pieza sigue provocando reacciones que van desde la diversión hasta la indignación, funcionando simultáneamente como obra de arte y sátira del propio mundo del arte.

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