Un equipo de buzos estadounidenses descubrió este verano más de 1,000 monedas de oro y plata valoradas en un millón de dólares, procedentes de un naufragio de la histórica Flota Española de 1715 frente a las costas de Florida.
El hallazgo, calificado como «raro y extraordinario», incluye más de 1,000 monedas de plata conocidas como reales, cinco monedas de oro llamadas escudos y otros artefactos de oro únicos. Las piezas fueron recuperadas por el Capitán Levin Shavers y la tripulación del barco M/V Just Right durante la temporada de salvamento de verano de 2025.
Un tesoro conservado por tres siglos
Las monedas, acuñadas en las colonias españolas de México, Perú y Bolivia durante el siglo XVIII, conservan fechas legibles y marcas de acuñación que las hacen valiosas tanto para historiadores como para coleccionistas. «Cada moneda es un pedazo de historia, un vínculo tangible con las personas que vivieron, trabajaron y navegaron durante la Edad de Oro del Imperio Español», declaró Sal Guttuso, director de operaciones de 1715 Fleet – Queens Jewels LLC, la empresa con derechos exclusivos de salvamento.
Los expertos creen que el excelente estado de conservación de las monedas sugiere que formaban parte de un solo cofre o envío que se derramó cuando el barco se desintegró durante el huracán de 1715. El descubrimiento se realizó en la llamada «Costa del Tesoro» de Florida, que abarca los condados de Indian River, St. Lucie y Martin.
Tragedia histórica de 400 millones de dólares
La Flota de 1715 partió de La Habana, Cuba, el 24 de julio de 1715, rumbo a Sevilla con cargamentos de tesoros del Nuevo Mundo para una España que había estado en guerra durante 12 años y necesitaba fortalecer su economía. El 31 de julio, un poderoso huracán destruyó 11 de los 12 barcos contra los arrecifes de la costa este de Florida.
Los historiadores estiman que se perdieron hasta 400 millones de dólares en oro, plata y joyas, además de entre 700 y 1,000 vidas humanas, constituyendo una de las mayores tragedias marítimas de América. Las monedas recuperadas serán sometidas a un proceso de conservación antes de ser exhibidas en museos locales de Florida.