Rusia, China y Pakistán presentaron ante el Consejo de Seguridad de la ONU una propuesta para que el órgano adopte una resolución exigiendo un alto el fuego inmediato e incondicional en Oriente Medio. Esta iniciativa surge en respuesta a los recientes ataques estadounidenses contra instalaciones nucleares iraníes, acción que ha elevado la tensión internacional y generado preocupación por una posible escalada militar en la región.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, calificó los bombardeos como un «giro peligroso» y urgió a los miembros del Consejo a actuar de inmediato para detener los combates y retomar negociaciones serias sobre el programa nuclear iraní.
Tanto Rusia como China condenaron los ataques de Estados Unidos. El embajador chino ante la ONU, Fu Cong, enfatizó que la paz en Oriente Medio no puede lograrse mediante el uso de la fuerza y que aún existen vías diplomáticas para abordar la cuestión nuclear iraní. Por su parte, el embajador ruso, Vassily Nebenzia, criticó la narrativa estadounidense y advirtió sobre las consecuencias de repetir errores históricos en la región.
La resolución propuesta no menciona explícitamente a Estados Unidos ni a Israel, pero sí condena los ataques contra instalaciones nucleares iraníes. Para ser aprobada, necesita al menos nueve votos a favor y ningún veto de los cinco miembros permanentes (Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y China).
Estados Unidos, representado por la embajadora en funciones Dorothy Shea, defendió su posición alegando que era necesario actuar para impedir que Irán obtenga armas nucleares y exhortó al Consejo a exigir a Irán que detenga sus supuestos esfuerzos por eliminar a Israel y desarrollar armamento nuclear.
La votación sobre el proyecto de resolución aún no tiene fecha definida, y se espera que Estados Unidos se oponga a la propuesta, lo que podría impedir su aprobación.