Durante los primeros 11 días del segundo mandato de Donald Trump, Estados Unidos reportó una baja del 85% de cruces migratorios en la frontera con México, en comparación con el mismo período del año anterior. La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) atribuye esta disminución a la implementación de nuevas medidas ejecutivas 13.
Las nuevas políticas migratorias han terminado con la práctica de «atrapar y liberar» migrantes y han acelerado la remoción de extranjeros detenidos en el país. También se suspendió el uso de la aplicación CBP One y los permisos humanitarios para ciertos grupos de migrantes1. Pete Flores, comisionado interino de la CBP, declaró que la disminución en los intentos de cruce ilegal, junto con un aumento en las repatriaciones, ha permitido a los agentes enfocarse en tareas de vigilancia y cumplimiento de la ley.
Entre el 21 y el 31 de enero, las detenciones realizadas por la Patrulla Fronteriza cayeron un 85% en comparación con el mismo lapso del año anterior.
Además, el número de personas consideradas inadmisibles en los puntos de entrada a la frontera suroeste disminuyó un 93% en los 11 días posteriores al 20 de enero, en comparación con los 11 días previos 24.
Fotografía de Ulises Castellanos en Arizona para ZZN