El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este domingo 4 de mayo de 2025 que ordenó a la Oficina Federal de Prisiones, junto con el Departamento de Justicia, el FBI y el Departamento de Seguridad Nacional, la reconstrucción, ampliación y reapertura de la prisión de Alcatraz. Esta medida tiene como objetivo albergar a los delincuentes más violentos, despiadados y reincidentes del país, así como a inmigrantes indocumentados que, según Trump, contribuyen al caos en las calles. Trump describió esta reapertura como un símbolo de «ley, orden y justicia» y un paso para «hacer a América grande otra vez».
Alcatraz, conocida como «La Roca», fue una prisión federal operativa entre 1934 y 1963, ubicada en una isla frente a la costa de San Francisco. Fue cerrada debido a los altos costos de mantenimiento y operación, que eran casi tres veces más caros que los de otras prisiones federales. La cárcel tenía capacidad para 336 reclusos y albergó a criminales notorios como Al Capone. Actualmente, es un destino turístico, pero Trump busca devolverle su función penitenciaria con una ampliación significativa para acoger a un mayor número de presos.
El anuncio se enmarca en la política de mano dura de Trump contra la criminalidad y la inmigración ilegal, enfatizando que Estados Unidos no debe ser rehén de criminales ni de jueces que, según él, no cumplen con su deber de expulsar a delincuentes que ingresaron ilegalmente al país. Se estima que la restauración de la prisión requerirá entre 3 y 5 millones de dólares solo para obras de mantenimiento, sin contar los costos operativos diarios.
